por Iván Ljubetic Vargas (*).
Es la crónica de un conglomerado de heterogéneas organizaciones políticas que, en apenas dos años, saltó de la cumbre de triunfos electorales al llano de una crisis, producto de la conciliación de tres de sus partidos (que sumaban 11 de los 20 diputados del Frente Amplio) con la derecha más cavernaria.
Inicios del frente amplio
El 21 de enero de 2017, en un acto efectuado en la Universidad de Santiago, tuvo lugar lanzamiento oficial del Frente Amplio.
Luego de recolectar más de 33 mil firmas, el 3 de mayo de 2017 se inscribió en el Servicio Electoral para poder participar en las primarias legales presidenciales y en las primarias parlamentarias en 7 distritos donde competirán con 28 candidatos.
Partidos y movimientos del frente amplio en 2017
Este conglomerado político y electoral estaba formado en 2017 por 14 partidos y movimientos:
Revolución Democrática,
Partido Humanista,
Partido Liberal de Chile,
Partido Ecologista Verde,
Movimiento Político Socialismo y Libertad (SOL),
Movimiento Democrático Progresista,
Movimiento Democrático Popular (MDP)
Poder Ciudadano,
Izquierda Libertaria,
Izquierda Autónoma,
Movimiento Autonomista,
Nueva Democracia,
Partido Igualdad y
Partido Pirata.
Grandes éxitos electorales en noviembre de 2017
El crecimiento de tres a 20 representantes en la Cámara de Diputados y su llegada con una carta al Senado es uno de los grandes triunfos del conglomerado.
El gran triunfo del Frente Amplio en las elecciones del domingo 19 de noviembre de 2017, además del 20,27% obtenido por Beatriz Sánchez en la primera vuelta presidencial, ampliamente superior a todos los pronósticos, fue la consolidación de la coalición como una tercera fuerza en el Congreso, que abrió grandes expectativas a la gente de izquierda.
Revolución Democrática (9 diputados)
1.Giorgio Jackson (30 años, Revolución Democrática, ingeniero civil industrial)
2.Natalia Castillo (35 años, Revolución Democrática, abogada)
3.Miguel Crispi (32, RD sociólogo, ex asesor del Mineduc y coordinador nacional de RD),
4.Pablo Vidal (34 años, RD, geógrafo),
5.Maite Orsini (29 años, RD, abogada y actriz)
6.Gael Yeomans (28 años, RD, estudiante de Derecho)
7.Renato Garín (RD, profesor de 31 años)
8. Catalina Pérez (RD, egresada de Derecho de 26 años).
9.Jorge Brito (RD, ingeniero civil de 27 años).
Partido Humanista (4 diputados)
1.Tomás Hirsch (fotógrafo de 61 años, Partido Humanista
2.Pamela Jiles (56 años, Partido Humanista, periodista y escritora )
3.Diego Ibáñez (28 años, Partido Humanista) egresado de Derecho
4.Raúl Alarcón (72 años, conocido popularmente como “Florcita Motuda”, Partido Humanista. Músico)
Movimiento Autonomista (3 diputados)
1.Gabriel Boric (31 años, Movimiento Autonomista, abogado)
2.Gonzalo Winter (30 años, del Movimiento Autonomista, y cercano a Gabriel Boric, abogado)
3.Camila Rojas (28 años, MA, administradora pública y ex presidenta de la FECH)
Partido Liberal (2 diputados)
1.Vlado Mirosevic, (30 años, Partido Liberal, cientista político)
2.Alejandro Bernales (38 años, del Partido Liberal, diseñador gráfico)
Partido Ecologista Verde (1 diputado)
1.Félix González (45 años, Partido Ecologista Verde, administrador público)
Poder (1 diputado)
1.Claudia Mix (48 años, Poder; trabajadora social)
Un Senador
El psicólogo Juan Ignacio Latorre (RD) se convirtió en la primera carta senatorial del conglomerado, representando la Región de Valparaíso.
Dato a tener en cuenta
En periódico digital El Desconcierto, de fecha 25 de noviembre de 2017 hay un antecedente que hay que tener en cuenta para explicarse la conducta del Frente Amplio:
“Para nadie dentro del FA, y sobre todo de las fuerzas que se reclamaban como su ala izquierda, es un secreto el que su representación parlamentaria es prácticamente nula. Si omitimos el ingreso de Camila Rojas de Izquierda Autónoma, la práctica totalidad de los diputados electos forman parte del sector más moderado del Frente Amplio, particularmente representado por Revolución Democrática, demostrando el importante trabajo que han realizado esos sectores, y el contraste con los logros obtenidos por las apuestas del sector “más a la izquierda”. Esto no puede leerse de otra forma que, como una derrota, evidenciada más claramente en el bajísimo rendimiento de la lista liderada por Francisco Figueroa en el distrito 10, las candidaturas de Cristian Cuevas y Carla Amtmann, así como a la pérdida de la legalidad por parte del Partido Igualdad por sus resultados”.
El Frente Amplio en la segunda vuelta presidencial de 2017
El Frente Amplio resolvió este jueves 30 de noviembre de 2017 llamar a sus adherentes a «reflexionar profundamente», votar en libertad y reiterar el llamado a sufragar en segunda vuelta, planteando que «confiamos en el voto de la gente».
A través de un comunicado de siete puntos leído por la excandidata presidencial, Beatriz Sánchez, expresaron que el proceso de reflexión se realizó en más de 100 comunas, donde determinaron ir en camino de un «gobierno transformador por decisión ciudadana, no por negociaciones que desemboquen en cargos o cupos en gobiernos de otras coaliciones».
Agregó:
«Se ha abierto un nuevo ciclo político en Chile, que nos instala como actores relevantes del futuro (…) como hemos dicho, no somos ni nos sentimos dueños de los votos de las personas y por eso nuestro primer llamado es a cada uno de nuestros votantes a reflexionar y expresarse en las urnas en esta segunda vuelta de acuerdo con sus propias convicciones y análisis».
«Llamamos a las y los chilenos a participar de la política, a involucrarse (…) en el Frente Amplio confiamos en el voto de la gente, y esperamos que quienes nos apoyaron concurran a las urnas este 17 de diciembre», señaló Sánchez.
Y concluyó:
«No nos da lo mismo quien gobierne, sabemos que Sebastián Piñera representa un retroceso, más desigualdad y exclusión, menos derechos, menos libertades, en sentido contrario a las demandas que día a día escuchamos en las calles».
De las 14 colectividades del bloque político, ocho entregaron libertad de acción a sus votantes, dos se opusieron al proyecto del senador y los cuatro restantes estaban abiertos a llegar a un acuerdo con condiciones.
En ese decisivo momento en la historia de Chile, cuando en el balotaje del 17 de diciembre de 2017 se decidía entre un gobierno que ofrecía mantener y profundizar las positivas reformas llevadas adelante por el Gobierno de la Nueva Mayoría y un gobierno neoliberal, el Frente Amplio mostró su sello pequeño burgués.
Proclamó:
“Se ha abierto un nuevo ciclo político en Chile, que nos instala como actores relevantes del futuro”.
Actores que hicieron mutis por el foro, escondiéndose en el argumento:
“Nuestro primer llamado es a cada uno de nuestros votantes a reflexionar y expresarse en las urnas en esta segunda vuelta de acuerdo con sus propias convicciones y análisis”.
Decretaron la libertad de acción a sus electores.
No es exagerado decir, que la actitud del Frente Amplio dio luz verde al triunfo de la derecha el 17 de diciembre de 2017.
The New York Times del 19 de diciembre de 2017 escribió:
“Calculadora en mano, por ejemplo, es muy difícil no concluir que una parte pequeña pero significativa de los votantes de la izquierdista (“izquierdista” según el periódico estadounidense) Beatriz Sánchez optaron en la segunda vuelta por el derechista Sebastián Piñera”.
Reordenamiento del Frente Amplio
Luego de las elecciones de 2017 se produjo un proceso de reordenamiento entre los integrantes de la coalición.
El 10 de noviembre de 2018 se realizó en el Teatro Huemul el inicio del proceso unificador del Movimiento Autonomista, Izquierda Libertaria (IL), Nueva Democracia (ND) y Socialismo y Libertad (SOL), que desembocó en la creación del Partido Convergencia Social, en mayo de 2019.
El 20 de enero de 2019, Izquierda Autónoma (IA) y Poder Ciudadano se fusionaron y constituyeron el Partido Comunes.
A inicios de 2019
A comienzos de 2019 el Frente Amplio quedó formado por ocho partidos y dos movimientos:
1.Revolución Democrática
2.Partido Humanista
3.Partido Ecologista Verde
4. Partido Comunes
5.Partido Liberal
6. Partido Igualdad
7.Partido Pirata de Chile
8.Partido Convergencia Social
1.Movimiento Autonomista
2.Movimiento Democrático Popular
Crisis y deserciones por firma del “acuerdo” del 15 de noviembre
Una prueba de fuego para el Frente Amplio lo constituyó enfrentar los embates de la rebelión popular iniciada el 14 de octubre de 2019.
Noviembre de 2019 se inició con un Chile en plena rebelión popular. Las masas a la ofensiva.
Enormes manifestaciones exigiendo una nueva Constitución a través de una asamblea constituyente, y el fin del neoliberalismo y las injusticias.
El gobierno de Piñera vivía una grave crisis política y económica.
La derecha que no tenía (ni tiene) influencia en las masas movilizadas, buscaron aplacar la crisis en el terreno de los partidos políticos, en especial, del Congreso Nacional, lugar predilecto también de Piñera.
Argumentando el peligro militar, convencieron a los tres partidos socialdemócratas (PS, PPD y PR), a la DC y a tres partidos del Frente Amplio (Revolución Democrática, Comunes y Liberal, más Gabriel Boric).
En una extensa reunión, que culminó a las 3 de la madrugada del viernes 15 de noviembre de 2019, nació el “Acuerdo por la Paz Social y Nueva Constitución”.
Fue un gran triunfo de la UDI, que tendrá enorme influencia en el desarrollo del proceso constituyente.
Un frente ya no tan amplio
La actitud personalista del diputado Gabriel Boric, militante de Convergencia Social, que participó en la “cocina” contra la posición de su partido, significó que renunciaran a Convergencia Social cerca de 200 militantes, siendo uno de ellos el Alcalde de Valparaíso.
El 21 de noviembre de 2019 el Partido Ecologista Verde abandonó el Frente Amplio, luego de realizar una consulta interna en que el 76% de los militantes votó por abandonar la coalición y el 24% por mantenerse.
El 29 de noviembre el Movimiento Democrático Popular comunicó su renuncia al Frente Amplio.
El 30, lo hizo el Partido Igualdad.
El 12 de diciembre, el Partido Humanista y el 26 de diciembre, el Partido Pirata de Chile.
Cámara de Diputados aprueba reforma constitucional
El lunes 16 de diciembre de 2019, la Cámara de Diputados aprobó la reforma constitucional que permite llevar a cabo el plebiscito para el proceso constituyente.
La votación contó con 127 votos a favor, 18 en contra y 5 abstenciones. Con este resultado, se ratifica el acuerdo transversal alcanzado el 15 de noviembre entre la mayoría de las fuerzas políticas.
La aprobación de la iniciativa implica que se llevará a cabo un plebiscito el 26 de abril en el que se deberá escoger si se aprueba o no la realización de una nueva carta fundamental y el mecanismo.
Si la cuestión planteada a la ciudadanía en el plebiscito ratificatorio fuese rechazada, continuará vigente la presente Constitución.
Se aprobaron las dos modalidades: Convención Mixta y Convención Constituyente, así como sus respectivas integraciones, inhabilidades y funcionamiento.
También se aprobó el quórum de 2/3 para que la Convención apruebe las normas del texto Constitucional.
Votaron a favor la derecha, la DC, PS, PPD, PR, Revolución Democrática, Comunes, Convergencia Social y PL.
Votaron en contra los nueve diputados comunistas: Hugo Gutiérrez, Carmen Hertz, Boris Barrera, Karol Cariola, Amaro Labra, Daniel Núñez, Marisela Santibáñez, Guillermo Tellier y Camila Vallejo.
Los tres diputados del Partido Humanista: Florcita Alarcón, Tomás Hirsch y Pamela Jiles.
Tres diputados de la Federación Regionalista Verde Social: Alejandra Sepúlveda, Jaime Mulet y Esteban Velázquez.
El diputado Félix González del Partido Ecologista Verde.
René Alinco, independiente e Ignacio Urrutia del Partido Republicano.
Las indicaciones relativas a paridad de género, escaños reservados para pueblos originarios y representación de independientes, fueron rechazadas, ya que no alcanzaron los 93 votos correspondientes a los 3/5 que necesitaban para ser aprobadas.
Lo ocurrido en esa reunión del Cámara encendió una acalorada polémica. A los sectores que siguieron la línea de la UDI le molestó que el PC, votara en contra del proyecto en general del plebiscito para una nueva Constitución.
A algunos les afloró el anticomunismo. Por ejemplo, Catalina Pérez, presidenta de Revolución Democrática declaró que “el Partido Comunista está derechamente saboteando el proceso constituyente”.
Luego, entrevistada en La Tercera, enfatizó:
“Son ellos quienes van a tener que explicarle a Chile sus razones para restarse y para haber renunciado a hacer política. El PC, contradiciendo toda su historia, no fue parte del proceso”.
Agregó:
“No hay argumentos para no sumarse a un acuerdo por más democracia y por una asamblea constituyente”.
Lo real es que ella, con su firma, contribuyó a enterrar el concepto asamblea constituyente y reemplazarlo por convención constituyente, que no es lo mismo).
El Frente Amplio al amanecer del 2020
Al iniciarse 2020 se mantienen en el Frente Amplio sólo cuatro partidos: Revolución Democrática, con siete diputados y un senador; Convergencia Social, con cuatro diputados; Comunes, con dos diputados y el Partido Liberal, con dos diputados.
Esta coalición quedó reducida a las organizaciones más proclives a posiciones conciliadoras con la derecha.
Tres de las cuatro participaron firmando el antidemocrático “Acuerdo por la Paz Social y una nueva Constitución” del 15 de noviembre de 2019: Revolución Democrática, Comunes y Partido Liberal.
Dos de ellas ostentan posiciones abiertamente contra el gobierno de Nicolás Maduro de Venezuela: Revolución Democrática y Partido Liberal.
Una de ellas, el miércoles 4 de diciembre de 2019 votó a favor del proyecto de leyes represivas de Piñera: Revolución Democrática.
Esta última, además, con tendencias anticomunistas.
Congreso estratégico: no a las alianzas nacionales
El Frente Amplio reafirmó el lunes 6 de enero de 2020 la resolución del Congreso Estratégico que realizaron el fin de semana, en la que votaron 295 delegados y determinaron, con 86% de respaldo, que para las próximas elecciones municipales no se realizarán alianzas nacionales con partidos de la ex Nueva Mayoría.
Eso sí, señalaron que se evaluarán pactos en comunas específicas:
“Nos vamos a presentar como un pacto frenteamplista, pero eso no cierra las puertas a dialogar de manera local con otras fuerzas”, precisó la excandidata presidencial del Frente Amplio, Beatriz Sánchez, en compañía de unos 100 dirigentes de los partidos de la coalición.
Advirtió que las conversaciones electorales con la oposición no tienen que ser “tan cupulares, donde llega a hablar una directiva con otra directiva”, sino que desde la ciudadanía.
“Dialogaremos con otras fuerzas, con disposición a llegar a acuerdos puntuales, siempre que sean útiles para el avance de un proyecto transformador”, señaló Javiera Toro, presidenta de Comunes.
Al parecer, el Congreso “estratégico” fue más bien táctico.
Es de esperar que los tres partidos que concurrieron a firmar el “acuerdo” del viernes 15 de noviembre de 2019 no vuelvan a caer en la fatal obsesión de pactar con la UDI y otras colectividades de derecha.
Con el acuerdo del Congreso del primer fin de semana del 2020, ¿podrá decir el Frente Amplio, como lo hizo en noviembre de 2017: “se ha abierto un nuevo ciclo político en Chile, que nos instala como actores relevantes del futuro”?
Pensamos que no.
(*) Historiador del Centro de Extensión e Investigación Luis Emilio Recabarren, CEILER