El partido Socialista resolvió llevar candidato propio a la primaria de la Nueva Mayoría, lo que significa mantener la fecha de decisión, probablemente una primaria interna, en abril. Sin embargo, la mayor consecuencia de dicha decisión, implica el rechazo a la propuesta del PPD, de llevar un candidato único del «mundo» progresista a la promaria del pacto oficialista, es decir, Lagos, con lo que su aspiración de un segundo período presidencial sufrió un rudo golpe.
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La directiva del partido socialista informó formalmente al PPD que preferían seguir con su itinerario trazado, descartando la idea de levantar una postulación conjunta, y de manera anticipada.
La dirección de este último partido analizará la carta enviada por el PS en su reunión de directiva del próximo lunes, pero desde ya se puede anticipar la decepción.
En efecto, a fines de noviembre el presidente de dicho partido, Gonzalo Navarrete había advertido que un candidato común, «es lo que le da garantías a esta coalición y permite una primaria legal en que haya un candidato que represente este mundo».
El propio Ricardo Lagos se había lanzado al ruedo en apoyo de esa tesis, con el argumento de que hacer primarias por partido implicaba no entender los tiempos de la política, pues mientras la coalición gobiernista cabildeaba, en la derecha Piñera no paraba de avanzar.
Asimismo, desde el PPD habían apelado a la tradición histórica conjunta que en materia presidencial han tenido ambas colectividades, tal como pasó el 2013 cuando los dos entregaron su apoyo a la postulación de la Presidenta Michelle Bachelet.
La decisión socialista liquida la aspiración de Lagos de convertirse en el candidato único del eje PS-PPD, en rigor, su mejor opción, porque cualquiera otra lo obliga a someterse a una primaria de todo el bloque gobiernista, con más de un candidato con posibilidades, escenario donde las encuestas claramente no lo favorecen, más aún si se trata de una primaria abierta.
De esta manera, ambos partidos determinarán su opción presidencial por cuerdas separadas.
El primero en hacerlo será el PPD, el cual en su Consejo General del próximo 14 de enero proclamará al ex Mandatario como su carta a La Moneda. De esta forma, Lagos quedará en condiciones de llegar directo a la primaria legal de la Nueva Mayoría del próximo 2 de julio.
El PS efectuará el pleno de su Comité Central el 21 de enero, día en que fijará las condiciones de la primaria interna que llevarán a cabo el próximo 23 de abril. En dichos comicios participarán el ex ministro José Miguel Insulza, el abogado Fernando Atria y el propio Lagos, si bien no son pocos en el partido quienes consideran que una vez proclamado por el PPD, carece de sentido de que compita en la primaria del PS.
Si Lagos no se presenta o no gana la primaria del PS, sus opciones de llegar al 19 de noviembre de 2017 en representación de lo que hoy es Nueva Mayoría se reducirían sensiblamente, pues tendría que competir en primarias con el ganador de la interna del PS y el senador Alejandro Guiilier, quién concurrirá por el PRSD, claramente mejor posicionado en las encuestas.
A su turno, otro de los competidores de la interna socialista, José Miguel Insulza, descartó bajarse de la carrera presidencial:
«De ninguna manera. A mí el único que me puede bajar es mi partido, si no votan por mí. Tenemos un proceso interno que tiene que cumplirse y espero que se cumpla. En mi caso, no veo posibilidad de resolver esto que no sea por la decisión de mi partido».
Insulza justificó la negativa del PS a realizar una primaria conjunta con el PPD, ya que ello significaría una designación cupular:
«El PPD propone designar en las cúpulas, después propone incorporar partidos que ni siquiera son de la Nueva Mayoría. Nunca se ha planteado derechamente la posibilidad de buscar un sistema concertado, sino más bien una posibilidad de apurar una designación cupular. Y eso es lo que ha molestado al PS. Yo no sé si esa molestia va a ser irreversible en verdad».
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Reunión con diputados socialistas
El martes, Ricardo Lagos se reunió con 13 de los 17 diputados de la bancada socialista. El tono circunspecto, diplomático y excesivamente formalista de los comentarios una vez finalizada la cita, sugiere claramente que que estuvo por debajo de las expectativas de Lagos.
Por ejemplo, el jefe de la bancada, Juan Luis Castro, manifestó que Lagos no presionó al partido para que lo respalde:
«Él, como lo dijo acá, es respetuoso de los tiempos, no presionó y el Partido Socialista se va a tomar los tiempos. Él vino a exponer sus puntos de vista porque nuestro comité decidió iniciar una ronda de conversaciones con él. Todos entendemos que si un candidato viene a un comité es porque quiere también buscar el apoyo, eso es la verdad y es por eso que nosotros también sabemos que el Partido Socialista tiene ritmos propios y que ojalá en enero podamos resolver o definir el mecanismo para resolver».
Consultado por la división que hay al interior del Partido Socialista entre las distintas candidaturas, donde algunos incluso se han reunido con el senador independiente Alejandro Guillier, Lagos recurrió a la diplomacia:
«Eso prácticamente no se tocó hoy. Fue un intercambio, cada uno tiene que tomar sus propias decisiones. En mi caso, yo hice mis planteamientos y ellos reaccionaron de distinta manera, como corresponde a un diálogo. Tuve una muy grata conversación con todos (…) fueron suficientemente diplomáticos».